Terremoto de 5,5 grados en la escala de Richter que dejó 300 muertos y más de diez mil personas sin techo.
Ocurrió a las 8:15 de la mañana el Jueves santo de 1983. Su epicentro estuvo a 4 k.m. de profundidad y afectó la catedral, el cementerio y el aeropuerto.